martes, 6 de septiembre de 2011

1 Propósito y Pasión

Uno tiene que saber donde quiere ir.
La cultura del Esfuerzo es buena.
Nadie va a ningún sitio si no se empeña
No te pienses sin Sangre!!!


Todos nacimos con un propósito. Todos estamos aquí por una razón y estamos aquí para servir a los demás. Somos como las células de un cuerpo: cada uno desempeña funciones únicas y, colectivamente, servimos a la totalidad del organismo. Una vida con propósito no es sólo una expresión auténtica de la persona que eres en realidad; es tu contribución al mundo y el mundo necesita lo que tienes para ofrecerle. Cuando vives en tu vida “con propósito” experimentas mayor plenitud y alegría en todo lo que haces. El universo te respaldará en todas tus empresas cuando vivas en concordancia con tu propósito, tu pasión y tu verdad interior.

Por ello debes dedicar un tiempo a mirar profundamente en tu interior e identificar tu misión y propósito en la vida. La mejor manera de hacerlo es mediante la contemplación, la oración y la meditación, pero hay algunas técnicas que puedes utilizar en este instante para ponerte en marcha. Puedes empezar por interiorizar el hecho de que no existen accidentes y de que esta vida y en este mundo, y tu contribución es insustituible.

La mayoría no sabe a ciencia cierta cuál es su propósito; no se ha dado el tiempo de sondear en su alma para descubrir su auténtica misión. Las cuentas por pagar, las responsabilidades y el trabajo nos han apartado de nuestro propósito, y tenemos tan poco tiempo libre que ni siquiera sabemos qué nos gusta en realidad. Esto es transigir con la persona que eres en realidad y con lo que tienes para ofrecer al mundo. Debes dar prioridad a descubrir tu auténtica misión en la vida. Si no vives una vida con propósito, no estás viviendo con todo tu potencial ni contribuyendo con todas tus capacidades.

Funciona de esta manera: a lo largo de toda tu vida has recibido señales acerca de cuál es tu propósito. Tienes dones, talentos, intereses, virtudes y cualidades completamente únicas, y naciste para utilizarlas. Aquello que te proporciona más alegría y te hace sentir verdaderamente vivo es otra pista sobre cuál es tu propósito. Todo se reduce a lo siguiente: naciste para hacer lo que te produce alegría, y tus dones y talentos son tu contribución al mundo. Una vida con propósito e intención enaltecerá y nutrirá tu espíritu en el nivel más profundo y, al mismo tiempo, contribuirá al mundo que te rodea.



Define tu propósito

Dedica unos momentos de paz y tranquilidad para apartar de tu mente cualquier distracción. Las siguientes técnicas te ayudarán iniciar el proceso para definir tu propósito, y conviene que contestes estas preguntas desde el lugar más profundo de tu conciencia, con ayuda de la oración y la meditación.

Empieza elaborando una lista de las ocasiones en que te has sentido más vivo y feliz en tu vida.

Analiza cuidadosamente esta lista y pregúntate qué tienen en común estas experiencias. Toma nota de ello. Este elemento común es un indicio de lo que te produce más felicidad… ¡y lo que te da felicidad es un indicio de tu propósito en la vida!

No hay comentarios:

Publicar un comentario