sábado, 15 de enero de 2011

En cada uno de Nosotros Dios Manifiesta si queremos su Gloria

Isaías (49, 3. 5-6)

El Señor me dijo: “Tú eres mi siervo, Israel; en ti manifestaré mi gloria”.

Ahora habla el Señor, el que me formó desde el seno materno, para que fuera su servidor, para hacer que Jacob volviera a él y congregar a Israel en torno suyo —tanto así me honró el Señor y mi Dios fue mi fuerza—. Ahora, pues, dice el Señor: “Es poco que seas mi siervo sólo para restablecer a las tribus de Jacob y reunir a los sobrevivientes de Israel; te voy a convertir en luz de las naciones, para que mi salvación llegue hasta los últimos rincones de la tierra”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario