domingo, 6 de junio de 2010

Los Ojos de nuestro corazón

Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en los lugares celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. 4Para nos ha elegido en él antes de la creación del mundo para ser santos e inmaculados en su presencia. En 5hec amor nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, de acuerdo con su gusto y voluntad, 6to alabanza de su gloriosa gracia, que nos ha dado libremente en Aquel que ama. 7En él tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de la gracia de Dios 8that prodigó a nosotros con toda sabiduría e inteligencia. 9Y hed nos dio a conocer el misterio de su voluntad según su beneplácito, el cual hizo en Cristo, 10a llevarse a cabo cuando los tiempos se han llegado a su cumplimiento a fin de llevar todas las cosas en el cielo y en la tierra bajo un solo jefe , el Cristo.

11 en lo que también fueron seleccionados, e habiendo sido predestinados según el plan de aquel que hace todas las cosas de conformidad con el propósito de su voluntad, para que 12 pulgadas, que fueron los primeros en esperar en Cristo, puede ser para la alabanza de su gloria. 13 Y también se incluyeron en Cristo cuando escuchó la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación. Después de haber creído, que fueron marcados en él con un sello, es el Espíritu Santo prometido, 14who un depósito que garantiza nuestra herencia hasta la redención de aquellos que son posesión de Dios, para alabanza de su gloria.

Acción de Gracias y Oración

15For esta razón, desde que escuché acerca de tu fe en el Señor Jesús y su amor por todos los santos, 16i no han dejado de dar gracias por vosotros, recuerdo en mis oraciones. Pregunta 17I seguir pidiendo que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre glorioso, les dé la Spiritf de sabiduría y revelación, para que pueda conocerlo mejor. 18i Oro también que los ojos de vuestro corazón sean iluminados para que usted pueda conocer la esperanza a que él os ha llamado, la riqueza de su gloriosa herencia en los santos, 19 Y su poder incomparablemente grande para nosotros los que creemos. Ese poder es como el trabajo de su fuerza poderosa, 20which que ejerció en Cristo cuando lo resucitó de entre los muertos y lo sentó a su diestra en los lugares celestiales, 21far encima de todo principado y autoridad, poder y señorío, y el título de todos los que se puede dar, no sólo en la época actual, sino también en el venidero. 22 Y Dios puso todas las cosas bajo sus pies y lo dio por cabeza sobre todo por la iglesia, 23which es su cuerpo, la plenitud del que lo llena todo en todos los sentidos.
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